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Mercedes sin rumbo y con un futuro incierto

today12 marzo, 2024 80 59 4

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El GP de Arabia Saudí hizo que volvieran a saltar las alarmas en Mercedes.

 

El equipo liderado por Toto Wolf ve como su monoplaza no es, nuevamente, suficiente para competir por los primeros puestos.

George Russel y Lewis Hamilton han tenido un comienzo de temporada complicado. Ambos pilotos han experimentado problemas en sus coches durante el transcurso de los dos primeros fines de semana.

El GP de Arabia Saudí no fue más que un recordatorio de su realidad actual. El equipo, que tan acostumbrados nos tenía con un dominio por sus éxitos en la era híbrida, parece haber vuelto a sus primeros años en la categoría.

 

El equipo alemán llegó a 2024 con la esperanza de que una renovación total del diseño de su monoplaza le ayudaría a recortar distancias con Red Bull, los actuales dominadores, pero, tras dos primeras mediocres carreras y con problemas en las mismas, ha quedado al descubierto una clara debilidad del coche: El Porpoising

Los botes en el vehículo y la falta de velocidad general hicieron que George Russell no pudiera presionar a Fernando Alonso durante este GP de Arabia Saudí.

El español, dos veces campeón del mundo, logró llevar su Aston Martin (AMR24) al límite en todo momento y mantener al joven piloto de Mercedes, que parece ser el futuro de la escudería, fuera del DRS durante 50 vueltas.

Russel salía séptimo y ha tenido una carrera bastante solitaria, sin llevar a cabo ningún adelantamiento y ganando una posición por estrategia.

Esto dijo el piloto de Mercedes: “Ahora mismo, estamos variando bastante en cuanto a rendimiento. Hemos visto potencial en el coche, pero desafortunadamente, en los dos últimos fines de semana no lo hemos demostrado. Necesitamos entender por qué ocurre eso. Hemos visto que todo está muy apretado entre McLaren, Aston Martin, Ferrari y nosotros»

El director de la escudería, Toto Wolff, afirma que no comprende del todo qué está fallando en las curvas de alta velocidad, ya que su rendimiento en la vida real no coincide con todo lo que están viendo en los datos de simulación.

Las dificultades con el W15 crean miedo en los corazones alemanes, que ven como un tercer año consecutivo de catástrofes es ya una realidad. Después de sus dos últimas nefastas campañas para olvidar, parece que el efecto suelo no ha sido resuelto y éste va a ser una continuación de los dolores de cabeza.

Wolff se muestra positivo y dice estar seguro de que la escudería se encuentra ahora en una situación diferente, y no tiene dudas de que descubrirán más pronto que tarde lo que no está funcionando: «Hace dos años que hay algo que tenemos que detectar, y eso es lo que hay que desbloquear.”

«Tenemos que trabajar más».

«No es por falta de ganas. Nos hemos esforzado mucho y vamos a seguir haciéndolo. Vamos a volver a Melbourne con fuerza. Tenemos una misión. Y estoy seguro al 100% de que vamos a abrir esa brecha de rendimiento».

Escrito por Josep Aulet Salazar

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